Toda la familia en la inauguración de la exposición. |
Hace unos meses publicaba aquí una entrada sobre una exposición que se organizaba con la obra de mi abuelo, Juan Barba, en La Vaguada (Madrid). Ahora tengo que hablar de otra, la organizada por los agustinos recoletos en su convento de Marcilla (Navarra). Se inauguró el pasado sábado, y allí que nos fuimos todos. Pasamos frío, sí, pero mereció mucho la pena. No solamente por contemplar la magnifica obra de mi abuelo, incluida la pintura que tiene en las pechinas de la iglesia del convento,sino por poder conocer y hablar con gente que estuvo con él en aquella época, gentes del pueblo, que se acordaban de cuando él estuvo allí tomando apuntes y monjes que nos recordaron algunos de los momentos vividos con él, no solamente allí,sino también en Madrid.
Foto recogida de la web agustinosrecoletos.org |
La exposición estará en Marcilla hasta el 30 de junio de 2011, así que si podéis ir a verla, vivís por allí o pasáis por aquella zona, no dejéis de visitarla.
Uno de los cuadros de la exposición de Marcilla |
Nota a pie de página.
Yo no puedo más que agradecer a los padre agustinos la labor que están haciendo de dar a conocer esta obra. Yo lo único que quiero es el reconocimiento de Juan Barba como artista de primer orden. El dinero para vivir ya lo conseguiré yo con mi trabajo y esfuerzo.
Y porqué estos últimos párrafos? pues porque a alguien de mi familia se le ha ocurrido la estupenda idea de echar mano de la SGAE, y escudándose en no se qué derechos pedirle a los frailes dinero por promocionar la obra de mi abuelo. Absurdo, verdad? Puede que según la SGAE tenga derecho, que no lo sé... pero hay tantas cosas abusivas que defiende este colectivo? El caso es que estoy totalmente en contra de todo este abuso y estoy convencida de que mi abuelo también lo estaría. Pero como dice el refrán... "poderoso caballero es don dinero" y hay personas dispuestas a ensuciar el nombre de una familia y de un artista e incluso frenar su promoción por un puñado de monedas. Y es que a estas alturas todavía hay gente que no se ha enterado de que el pan se gana con el trabajo propio.Es mucho más cómodo seguir viviendo del cuento, pero mucho más indigno, también.
Lo más triste de todo esto...que mi abuela se ha dejado convencer y también ha reclamado ese dinero
No hay comentarios:
Publicar un comentario